Cómo relajarse, como meditar. Hoy empiezo

COMO RELAJARSE.
Empieza con una dieta saludable. El azúcar y la cafeina son tus enemigos. Ambos causan altibajos emocionales y alteran la capacidad de tu cuerpo para regular su propia energía. En vez de tomar esos entremeses azucarados y llenos de carbohidratos (como esas galletas o la granola), come fruta fresca, pan integral o galletas de agua (sin azúcar). Asegúrate de incluir una buena cantidad de proteínas (carne de pollo, vaca, granos enteros) y reduce la cantidad de grasa diaria.

Busca un lugar tranquilo cuando te sientas sin fuerzas. La banqueta de una plaza, el ático, una iglesia, donde sea que encuentres quietud.

Una vez que te encuentres en un lugar tranquilo, cierra tus ojos e imagina tu propio paraiso. Colócate allí e imagina las cosas a tu alrededor. ¿Qué ves a tu alrededor? ¿Sientes la brisa? ¿Qué escuchas? ¿Pájaros? ¿Olas? ¿Agua? Imágina que estás allí disfrutando de cada momento en tu lugar especial.

Respira. Inhala profundamente, cuenta hasta cinco, exhala lentamente, cuenta hasta cinco y vuelve a empezar. Haz esto cinco veces.

Cuando vuelvas a tu trabajo, toma una tarea, solo una, y concéntrate en ella. Cuando hayas terminado con esa, comienza otra. No permita que tu mente se preocupe por las miles de cosas que tienes que hacer. Piensa solamente en lo que tienes que hacer hasta que tengas que dejarlo de lado para comenzar otra tarea.

Evita a la gente que anda con los cabellos de punta. El estrés puede ser contagioso, así que evita a los emisores de estrés.

Si estás entrando en actividades que te puedan hacer sentir culpable, ¡Detente! Busca ayuda profesional de ser necesario pero no dejes que una conducta destructiva destruya tu salud y tu vida. La culpa es una fuente potencial de estrés, así que elimínala de raíz. No te permitas cometer errores que a la larga te perjudicarán seriamente.

Ejercita tu cuerpo cada día. No necesitas poner tu cuerpo como el de una celebridad. Dedica al menos veinte minutos (o más, si gustas) cada día a una actividad moderada. Caminar o manejar bicicleta es sabido y comprobado científicamente que reducen el estrés. Camina en una cinta interminable cada día por veinte minutos, toma las escaleras en vez del elevador y parquea tu auto un poco más lejos de lo habitual. Verás con que facilidad superas el estrés cuando te ejercitas regularmente.

Aprende a priorizar y ser ordenado. Haz una lista de actividades para cada día. Coloca lo más importante en al tope de la lista y ve anotándolas en orden de importancia. Aprende a ser proactivo y preparate para los problemas antes que estos aparezcan, así tu tiempo será mucho méjor utilizado y te sentirás con mucho menos estrés.

COMO MEDITAR.
Crea un ambiente tranquilo y relajante. Apaga la televisión y cualquier otro aparato que pueda hacer ruido. La música suave puede venir bien, pero no es necesaria. Asegúrate que hayas apagado tu teléfono móvil.

Siéntate en una silla o sobre un almohadón.No tienes que doblar las piernas para ponerte en la posición de loto o en alguna posición inusual, pero puedes hacerlo si es confortable para ti.

Cierra tus ojos o encuentra algo tranquilo que puedas mirar. Es posible que desees usar una pequeña vela para esto.

Cuida de estar bien sentado, de modo que tu posición te permita respirar con facilidad. Esto ocurrirá naturalmente si tus rodillas están debajo del nivel de tu cintura. No es recomendable tenderse completamente, es posible que quedes dormido al meditar en esta posición.

Cuida tu respiración. No intentes cambiar la forma en la que lo estás haciendo. Solo deja que tu atención se centre en como fluye el aire por tu cuerpo. El objetivo de este paso es lograr que tu mente se ponga en blanco gradualmente.

Relaja cada músculo de tu cuerpo. No te apresures al hacerlo, toma tiempo relajarse completamente y uno debe hacerlo poco a poco. Empieza por la punta de tus pies y ve subiendo hasta que llegues a tu cabeza.

Mentalmente concéntrate en palabras que te agraden y vayan contigo. Si eres una persona visual, en palabras que evoquen imágenes. Si eres una persona auditiva, en palabras que evoquen sonidos. Si eres una persona kinestésica (movimiento), usa palabras que evoquen sentimientos.

Repite estas palabras de modo que te animen a lograr lo que deseas. Por ejemplo, repite lo relajado que estás diciendo "Estoy completamente relajado"

Visualiza un lugar tranquilo para ti. Este puede ser real o imaginario. Este paso puede reemplazar la repetición de palabras, trabajar juntas o ser omitida si deseas.